¡Bienvenido Mr. Marshall!

¡Americanos, os saludamos con alegría.
Olé mi padre. Olé mi madre y Olé mi tía!
Han llegado los americanos.
Había expectación por ver en qué plan venían.
Nos hemos juntado unos cuantos representantes del ciclismo de la comarca para salir con ellos.
La verdad es que pensabamos que serían un grupo, digamos, más "pro".
Y han resultado ser un grupo de cicloturistas... más turistas que "ciclo".
Había de todo. La mayor parte iban equipados con sus mochilas y sus camaras de fotos preparados para "dar una vuelta". Había uno que tenía una cámara que le pesaba mas que su bici!
Otra llevaba unos retrovisores más grandes que los de un camión. Yo creo que llevaba hasta intermitentes...
Había gente de mediana edad, gente mayor y gente más mayor. Pero todos con un espiritu super divertido. Por un momento me pareció ver a "Doña Cloqueta", pero luego no la volví a ver.
A quien no vi es a Lance Armstrong...
Algunos; pocos, se les veía que tenían ganas de rodar más fuerte. Uno, con pinta de "Latin King", estaba calentando y de repente se para delante nuestro, saca una bolsita de plastico con pastillas de varios colores, coje una blanca y se la toma.
Le dije: "Hombre! Uno viene "dopao" de casa. No lo hace delante de todo el mundo!" Y me contesto que eran sales. Si, si, sales... Acto seguido, va el tio y se mete un sobre de gel energetico, sin haber hecho ni un kilometro! Este tío va a salir de aquí levantando rueda, pensé.
Dupont P, responsable fundamental de todo este montaje, se los miraba como diciendo: "Vaya peña!"
Por fin nos pusimos en marcha. A ritmo cansino nos dirigimos a Pals y allí es donde claramente se vieron las intenciones de casi todos los yankees: hacer fotos.
Así que un grupito de unos doce, entre los que había tres americanos, empezamos a rodar en plan serio. Por supuesto, el "Latin King", venía con nosotros, aunque yo no le vi tomar más pastillas...
Ahora en serio, los tres eran muy buena gente. Muy educados y muy amables. No hacian más que decir lo bonito que era todo.
Y muy agradecidos. Insistieron en pagar la cuenta en Ca la Nati. Les dijimos que así harían muchas amistades por aquí...
En fin, una salida diferente.
¡Hasta la próxima!